
La designación de Julian Assange como prisionero político por parte de la PACE fue la única parte de la resolución del Consejo Europeo en la que los atlantistas intentaron siquiera montar una acción de retaguardia.
Gran Bretaña se enorgullece de ser un Estado liberal, tolerante con diversos puntos de vista y con un sistema judicial basado en la ley y la evidencia, pero su comportamiento reciente ha sido todo menos eso, informa Alexander Mercouris.