
La situación de Siria es como el caos de Libia pero hay muchos más actores (locales y externos) operando, lo que hace difícil prever lo que sucederá.
Hubo elecciones egipcias antes de Mohammed Morsi, quien subestimó los impulsos antidemocráticos de las tiranías árabes y asumió que los gobiernos occidentales no tolerarían el derrocamiento de un presidente elegido democráticamente.
El régimen militar de Egipto está reprimiendo a la oposición política aún más ferozmente que la dictadura de Mubarak, al mismo tiempo que colabora en el estrangulamiento de Gaza, escribe el ex analista de la CIA Paul R. Pillar.
El régimen golpista de Egipto, respaldado por Estados Unidos, ha virado aún más hacia la represión política del gobierno democráticamente elegido de Morsi, incluidas sentencias de muerte masivas para sus seguidores. El espectáculo ha estimulado cierta oposición estadounidense a la continuación de la ayuda militar, como señala el ex analista de la CIA Paul R. Pillar.
El gobierno de Estados Unidos dice que quiere difundir la “democracia”, una afirmación cuestionable considerando la historia. Pensemos en Irán-1953, Guatemala-1954, Chile-1973, Haití-1991/2004, etc. Tan solo el año pasado, Estados Unidos ha apoyado golpes de estado contra presidentes electos en Egipto y ahora en Ucrania, como observa Lawrence Davidson.
A los estadounidenses les gusta la idea de promover la “democracia”, pero destacados comentaristas estadounidenses elogiaron la destitución de líderes elegidos democráticamente en Egipto y Ucrania, poniéndose del lado de los militares golpistas en Egipto y los alborotadores de derecha en las calles de Ucrania. Eso sugiere “democracia”…
Al derrocar al presidente electo Morsi y buscar erradicar a sus partidarios de la Hermandad Musulmana, el ejército de Egipto ha desencadenado una ola de violencia que amenaza con profundizar las tensiones en toda la región, incluso en la Franja de Gaza e Israel, escribe un ex-CIA...