Nueva Zelanda está intensificando su adulación estadounidense para conseguir un lugar destacado en la creciente militancia de Washington en la región, informa Mick Hall.
Desde ocultar el papel de Occidente en la hambruna de Gaza hasta relatos sensacionalistas de violaciones masivas por parte de Hamás, los periodistas actúan como propagandistas, escribe Jonathan Cook.
En los principales medios de comunicación angloamericanos la matanza de palestinos se considera normal. Lo único que importan son las vidas israelíes, escribe Des Freedman.
Peter Oborne contrasta la causa célebre de la prensa libre que surgió después del escándalo de las escuchas telefónicas británicas con el silencio y la hostilidad que envuelven el caso mucho más trascendental del editor de WikiLeaks.
El fracaso de los periodistas a la hora de montar una campaña para liberar a Julian Assange, o exponer la cruel campaña de difamación en su contra, es otro error catastrófico y contraproducente de los medios de comunicación.
Matt Kennard, del Reino Unido desclasificado, se sienta con el expresidente de Ecuador, quien en 2012 concedió asilo al editor de WikiLeaks y ahora él mismo vive en asilo político.