Las personas que viven en países asolados por conflictos consideran cada vez más que la ONU promueve los intereses de Occidente y los poderosos, escribe Jamal Benomar. Este no fue siempre el caso.
Es difícil pensar en una palabra para describir todo esto además de "mal". Si intervenir para garantizar la continua hambruna masiva de niños y la matanza militar masiva de civiles no es malo, entonces nada es malo, dice Caitlin Johnstone.
Recordamos los orígenes de la guerra saudí contra Yemen, respaldada por Estados Unidos, y un acuerdo de paz de la ONU, saboteado por Riad, que estuvo a punto de evitar la guerra, como informó Joe Lauria en mayo de 2015.