
Con la nueva acción estadounidense de hoy contra Moscú, el Russiagate sigue siendo como un vampiro, sin nadie capaz de clavarle una estaca de madera en el corazón y mantenerlo allí.
La falta de detalles exigida por Pelosi puede significar simplemente la ausencia de pruebas creíbles de la interferencia rusa, así como la ausencia de funcionarios clapperescos que la evoquen.
Veteran Intelligence Professionals for Sanity ha escrito un nuevo memorando al Fiscal General William Barr con respecto a nuevas pruebas que indican que no hubo ningún hackeo de las computadoras del Comité Nacional Demócrata.