
No nos equivoquemos: este es el avance de una agenda para poner fin a la existencia del pueblo palestino en su patria histórica, escribe Caitlin Johnstone.
El público estadounidense ya debería estar dándose cuenta de que en lugar de detener el genocidio, las autoridades institucionales y mediáticas estadounidenses están sofocando activamente los gritos para detener el asesinato en masa que se está cometiendo con la complicidad de Estados Unidos, escribe Elizabeth Vos.