El Partido Laborista Australiano, que suspendió a un senador por romper con el partido para votar por el reconocimiento de Palestina, nunca escuchó hablar del concepto de valentía del Senado de JFK, informa Joe Lauria.
Si el progreso en un proceso de paz que conduzca a una solución de dos Estados sigue siendo el único camino de Australia hacia el reconocimiento de un Estado palestino, los palestinos han quedado colgados, escribe Stefan Moore.