Peter Oborne contrasta la causa célebre de la prensa libre que surgió después del escándalo de las escuchas telefónicas británicas con el silencio y la hostilidad que envuelven el caso mucho más trascendental del editor de WikiLeaks.
Las cenizas del senador Mike Gravel fueron enterradas en el Cementerio Nacional de Arlington el mes pasado. Gravel fue un héroe por su valentía al oponerse al militarismo estadounidense y leer los Documentos del Pentágono de Dan Ellsberg en el Registro del Congreso.
Ellsberg nunca habría podido publicar los Documentos del Pentágono si primero no hubiera hecho algo mucho más grande, si no hubiera cambiado su vida: la forma en que la vivió y lo que hizo con ella.
En la audiencia de extradición de Assange en Londres, Ellsberg luchó contra la forma en que la publicación de WikiLeaks de los documentos de Manning, de manera similar a los Documentos del Pentágono, había sido demonizada y luego criminalizada.
Cuando el autor denunció el programa de tortura de la CIA en 2007, Daniel Ellsberg lo llamó para felicitarlo y decirle que tenía amigos a su lado. Años más tarde, en un evento de alfombra roja en Hollywood, el "hombre más peligroso de...
Uno de los hombres más valientes de Estados Unidos, que se enfrentó al gobierno más poderoso del mundo para exponer sus mentiras sobre la guerra de Vietnam, murió a los 92 años.
La Ley de Espionaje, tal como se aplica al editor de WikiLeaks o a cualquier otro periodista, también viola las normas básicas del debido proceso, sostiene Bruce Afran.
Por mucho que los defensores del statu quo militarista hayan intentado relegar al pasado al denunciante de los Papeles del Pentágono, él ha insistido en estar presente, escribe Norman Solomon.
Si Julian Assange es extraditado, enfrentará un proceso bajo una severa ley de espionaje con raíces en la Ley de Secretos Oficiales británica que es parte de una historia de represión de la libertad de prensa, informa Joe Lauria.