29 de octubre 2000George W. Bush: el hombre de ninguna parte Nota del editor: Puede encontrar información actualizada sobre el historial de viajes de Bush en un historia presentada el 15 de junio de 2001.
NLas encuestas nacionales muestran que el pueblo estadounidense está a punto de elegir como presidente de la única superpotencia que queda en el mundo al gobernador de Texas, George W. Bush, un hombre de 54 años que nunca ha estado en Francia, Gran Bretaña o Estados Unidos. Alemania o Rusia, según información proporcionada por su campaña.
Según la información de la campaña, parece que Bush nunca se abrió paso entre la multitud de Tokio, ni visitó la Plaza Roja de Moscú, ni tomó un ascensor hasta la cima de la Torre Eiffel, ni contempló el Big Ben, ni caminó entre las ruinas de antigua Grecia, o experimentó decenas de otras aventuras internacionales.
Parece que Bush no sólo no conoce los nombres de muchos líderes mundiales, sino que quizá sólo tenga un conocimiento rudimentario de dónde están esos países y cómo son.
El candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos podría considerarse el hombre de ninguna parte por excelencia, ya que ha ido a menos lugares y ha adquirido menos experiencia mundial que cualquier candidato a la presidencia en la historia moderna de Estados Unidos.
Aparte de los viajes a México, el país fronterizo con Texas, Bush afirma que sólo realizó tres viajes al extranjero. Su estancia más larga fue una estancia de un mes en China en 1975, cuando su padre era enviado de Estados Unidos.
The New York Times citó este viaje en un artículo sobre la sorprendente ambición de Bush de ser presidente, señalando que su "experiencia en el extranjero se limitó bastante a tratar de salir con mujeres chinas (sin éxito) durante una visita a Beijing en 1975". [NYT, 29 de octubre, 2000]
Otro viaje al extranjero fue con una delegación de gobernadores estatales al Medio Oriente en 1998, dijo la campaña de Bush. En el camino, Bush se detuvo en Italia para ver a una de sus hijas, aparentemente la única vez que Bush estuvo en Europa.
El tercer viaje al extranjero fue una visita al país africano de Gambia como parte de una delegación estadounidense que conmemoraba la independencia de Gambia. [NYT, 30 de octubre de 2000]
Esos tres viajes dejan de lado vastas áreas del mundo y sugieren una falta de curiosidad sobre la gente y la historia fuera de las fronteras estadounidenses.
La campaña de Bush buscó comparar la falta de conocimiento del mundo de Bush con la de los presidentes Bill Clinton, Ronald Reagan y Jimmy Carter. Pero esos presidentes habían viajado mucho por el mundo.
Clinton había sido becario de Rhodes en Inglaterra y visitó gran parte de Europa, incluido Moscú. Reagan había viajado como actor de cine y representante de Estados Unidos. Carter sirvió en la Marina de los Estados Unidos.
La falta de experiencia mundial de Bush es particularmente sorprendente, dado que era hijo de un privilegiado y tenía un padre que fue embajador de Estados Unidos ante las Naciones Unidas y director de la CIA. A pesar de estas ventajas, Bush aparentemente optó por permanecer cerca de casa, evitando los desafíos y la emoción de los viajes internacionales.
Esa mentalidad de quedarse en casa puede no ser infrecuente para muchos estadounidenses. Pero contrasta marcadamente con los requisitos esperados de servir como presidente de Estados Unidos en un momento en que muchas naciones consideran a Estados Unidos como el líder mundial.